Diagnosis Forense en la investigación de siniestros

La figura del médico forense es muy conocida y a lo largo de la historia tenemos ejemplos fantásticos de la solvencia y capacidad resolutiva que presentan ante casos que ni los propios investigadores, policías, o peritos especialistas de toda índole han sido capaces de acreditar. Su misión no es otra que la de llegar un paso mas lejos y examinar a la víctima extrayendo, con métodos científicos y acreditables, la información oculta que no puede ser obtenida de ninguna otra manera.

A la hora de enfrentarse a un encargo pericial en la mayoría de los casos abunda la información o los cauces para conseguirla de forma mas o menos sencilla y que posibilitan la resolución del expediente; ejemplos pueden ser la declaración de siniestro, los atestados policiales, la entrevista de testigos, el análisis de huellas y vestigios o, por qué no, también las diagnosis que habitualmente realizamos en nuestra empresa conectándonos remotamente al sistema electrónico del coche.

Pero… ¿Qué sucede cuando tras realizar todas las gestiones posibles solo contamos con una información insuficiente o poco fiable?… dicho de otro modo…¿Qué hacemos cuando lo único a lo que podemos aferrarnos es la propia «víctima»?.

 

¿Existen forenses en el mundo del automóvil?

La respuesta no puede ser otra que sí, y en el sentido más amplio de la palabra.

 

Mucho más lejos de ver dónde se ubica el foco inicial de un incendio, de comprobar al microscopio si una lámpara fue fracturada estando encendida o analizar con un espectofotómetro el vestigio de pintura depositada en un vehículo, hay veces que es necesario profundizar aún más en la investigación, ya sea cuando estas tareas no arrojan suficiente luz para la resolución del expediente o bien cuando ni siquiera es posible llevarlas a cabo, y la mejor manera de hacerlo es analizando todos los datos alojados en las distintas centralitas del vehiculo.

 

La diagnosis forense son las técnicas que se centran en la extracción de los datos de las centralitas electrónicas de un vehículo cuando por medios físicos habituales no es posible.

 

Para ello se utilizan diversos métodos con objeto de posibilitar la alimentación de las unidades y la conexión electrónica de la memoria interna con dispositivos compatibles para la extracción de la información almacenada en las mismas, como el dispositivo de Miperito Connect.

Por tanto, para que una diagnosis electrónica de investigación de siniestro «convencional» pueda ser considerada como «diagnosis electrónica forense», el perito especialista actuante precisa realizar acciones físicas no estandarizadas para la obtención de datos.

Uno de los ejemplos más frecuentes es en siniestros muy violentos en los cuales el automóvil corta la tensión de la batería, no da contacto por algún motivo, o simplemente se ha dañado el cableado, se llevan a cabo instalaciones eléctricas complementarias que posibilitan alimentar la centralitas electrónicas y la red de Can-Bus o interceptar dicha red antes de la existencia de un cortocircuito en la misma, siendo posible la conexión con nuestro dispositivo de diagnosis.

 
 

El éxito de estas investigaciones lo encontramos habitualmente en la determinación de velocidades de circulación en el momento de producirse un siniestro, la fecha u hora de la avería o desmontaje de componentes electrónicos, el origen, el kilometraje real o posibles averías mecánicas previas, fallos mecánicos que puedan originar siniestros o, incluso, la manipulación de los sistemas antirrobo-

Asi mismo, para solicitar este tipo de trabajos no es necesario ni que el automóvil esté presente o exista, es más, entre los trabajos más habituales de este tipo que se realizan está el de la identificación de números de bastidor en centralitas encontradas en almacenes de piezas robadas, siendo de vital importancia para la puesta a disposición judicial de los delincuentes al ser una prueba con validez judicial que acredita la procedencia de las piezas y la identificación de los vehículos sustraídos por las bandas.

 
 

Si bien hasta el momento solemos actuar como último recurso cuando todas las demás gestiones han sido infructuosas, cabe destacar que resulta mucho más práctico y rápido empezar por estos trabajos y después realizar gestiones que procedan con investigadores privados o peritos tradicionales, pues una vez conocidos todos los detalles extraídos, se puede conseguir una rápida y certera resolución del siniestro, y, generalmente, mucho mas económica.

 

Si necesita de una pericia de este tipo no dude en contactarnos, ya que realizamos trabajos integrales de pericia forense, tanto de manera tradicional como a través de procedimientos electrónicos, si bien hay que ser honestos y debemos advertir que nunca existe una garantía total de la posibilidad de extracción de los datos, bien porque las unidades hayan sido dañadas internamente o bien las unidades disponibles no aporten toda la información necesaria.

La importancia de la cadena de custodia en la Prueba Pericial… ¿cualquier telediagnosis sirve?.

Son muchos los especialistas de la automoción que saben perfectamente que «esto de la tele-diagnosis» no tiene nada de nuevo. De hecho, es casi tan antigua como el propio conector OBD, pues la norma SAE J2534, por la cual se inicia el protocolo Passthru para conexiones remotas, data del año 2000…

20 años después, casi cualquier máquina de diagnóstico permite al taller tener soporte directo del fabricante, tanto del vehículo, como del propio desarrollador de la máquina. Marcas como Texa, Berton, Autel, Launch, etc, lo incorporan desde hace años y cuya intención, evidentemente, es como ayuda al taller de reparación.

También hay empresas que bajo el mismo fin, han ido un paso mas lejos, como Jifeline , que pone a tu disposición su propio sistema de telediagnosis para que lo revendas con tu imagen de marca, si es que tu intención es actuar como un especialista, no obstante no dejas de ser un intermediario con ventajas, pues si tu no sabes hacer la diagnosis o no tienes tiempo de hacerlo lo hacen ellos sin que tu cliente final lo sepa, (podeís ver alguno de sus clientes pinchando aquí). Este sistema también es estupendo para talleres e incluso hay franquicias de talleres que lo ofrecen a sus franquiciados como soporte ya que sus caracteristicas van encaminadas a la reparacion y borrado de averias mas que a la extraccion de datos especificos.

No obstante, si estas leyendo todo esto, es porque realmente lo que te interesa es la validez de una telediagnosis para la investigación de un siniestro, averia o delito.

Asi que la verdadera importancia de una telediagnosis como prueba pericial recae directamente en todos aquellos requisitos judicialmente establecidos tanto para cumplir tanto con la condicion de perito, como para la validez de todo el proceso, especialmente su trazabilidad y la cadena de custodia de la prueba.

   

Vamos a explicar un poco que es la custodia de la prueba pericial:

Se puede definir la cadena de custodia como el procedimiento que se debe documentar adecuadamente con el objeto de permitir de manera univoca sin ningún tipo de duda al respecto la identidad, integridad y autenticidad de los datos obtenidos desde que son extraidos hasta que se aportan al proceso judicial en forma de informe pericial.

La Sentencia del Tribunal Supremo (Sala de lo Penal) 208/2014, de 10 de marzo de 2014 considera que: «Se viene entendiendo por la doctrina como «cadena de custodia», el conjunto de actos que tienen por objeto la recogida, el traslado y la conservación de los indicios o vestigios obtenidos en el curso de una investigación criminal, actos que deben cumplimentar una serie de requisitos con el fin de asegurar la autenticidad, inalterabilidad e indemnidad de las fuentes de prueba.»

Por tanto es casi mas importante demostrar la autenticidad e inalterabilidad de los datos recogidos y conservación de la fuente de prueba para el caso de, por ejemplo, la intervención de un perito judicial, que el propio resultado obtenido de la diagnosis.

   

Pero no solo es «la maquina», hablemos un poco de los requisitos del perito firmante de esa telediagnosis:

Pues la Ley de Enjuciamiento civil previene en su articulo 335 y en el 340, algunos de los requisitos exigibles a los peritos en materia de conocimientos, titulacion academica, o acreditacion de conocimientos.

El articulo 340, por ejemplo, condiciona a los peritos a poseer el titulo oficial que corresponda a la materia objeto del dictamen y a la naturaleza de este, asi como a el reconocimiento de ser nombrados entre personas entendidas en la materia, como pudiera ser un certificado de colegio profesional, en el caso de pericias que no se adscriban a una formacion reglada. Por tanto, si estamos actuando para una aseguradora es de recibo poseer la certificacion profesional como Perito de Seguros avalada por la Direccion General de Seguros, dependiente del Ministerio del Interior.

El articulo 335, ademas de lo anterior que queda descrito en su parrafo 1º, tambien hace alusión a las consecuencias penales que en las que se podrian incurrir por incumplir el deber como perito, por tanto, es evidente, que todo dictamente debe estar firmado por un perito reconocido, acreditado, formado, certificado, y a ser posible, con un codigo deontologico que recoja su actividad pericial, ya sea un colegio profesional, asociacion o colectivo legalmente establecido y generalmente reconocido, como puede ser APCAS en el caso de los peritos de seguros.

   

Veamos pues la validez de la prueba en su conjunto:

Existen muchos y muy conocidos casos en los que asesinos, violadores, traficantes o ladrones consiguen zafarse del peso de la ley cuando sus abogados consiguen invalidar las pruebas, ya sea por cuestiones de inaptitud del perito, por el método de obtencion de los datos o directamente por fallos en la cadena de custodia de la prueba.

Asi pues la validez de la prueba va a ser lo primero que la parte perjudicada del resultado de la telediagnosis va a cuestionar ante el juez, ya sea por ejemplo ante la exclusion de un siniestro, ante un proceso penal iniciado por oficio por la simulacion de un robo, o ante un delito contra la seguridad del tráfico.

Asi que la validez de una telediagnosis se basa fundamentalmente en que la persona que la realice sea un Perito acreditado, correctamente formado y a ser posible reconocido. La prueba debe ser tomada sin que nada pueda afectar al trasbase de informacion, es decir del coche a tu oficina, sin pasar por telefonos moviles de terceros, servidores de intermediarios, o conexiones wifi, y por supuesto, poder acreditar que se ha tomado lectura en el lugar indicado y en el vehiculo indicado, y no ante una centralita conectada a una bateria que ante «una maquina sin ojos» se crea que está ante el coche completo y en segun qué estado.

 

Por tanto, resulta evidente que no todo sirve, y mucho menos aquellas diagnosis que no cumplan estas premisas, pues para un primer rechazo de un siniestro podria valer, pero luego en el juicio…..

   

En conclusion….. No, no sirve cualquiera.

Aunque tu tengas un boligrafo y un papel, y puedas escribir y firmar, eso no te convierte en notario, asi que si realmente necesitas una prueba pericial tendras que acudir a un sistema que sea capaz de cumplir con todos los requisitos y caracteristicas necesarias para que no invaliden la prueba.

Por ello es sumamente importante la trazabilidad y custodia de los datos obtenidos, constatación de su legitimidad y el correcto análisis de los resultados por parte de un perito acreditado.

   

Entonces… ¿Que devemos evitar antes de contratar un servicio pericial de telediagnosis?

  • Evitar cualquier empresa que use una plataforma externa.
  • Asegurarse que el dispositivo es capaz de georeferenciar el lugar de la prueba de forma automatica y remota.
  • Comprobar que dicho sistema obtiene imágenes o vídeos, con una total trazabilidad en cuanto a la fecha y hora GMT y geoposicionamiento de la toma.
  • Solicitar la acreditación como perito de seguros de vehículos automóviles con formación reglada y reconocimiento profesional a cualquiera que firme el informe de la diagnosis.

Y con todo esto no queremos decir que no haya otros sistemas diferentes al nuestro, o que incluso puedan obtener similares datos a los que podamos extraer desde nuestra empresa, solo que cada cliente debe valorar hasta que punto le compensa destinar tiempo, recursos y dinero en algo que, ante una simple pregunta de un abogado de la parte contraria, invalide toda la carga de la prueba y el pilar fundamental, por ejemplo, del rechazo de un siniestro.